martes, febrero 10, 2009

Lo que me encanta de la vida

  • que uno puede despertar plenamente consciente que el primer paso lo está dando con el pie izquierdo y que al final del día puede uno estar tan contento que ni puede creer que hasta lágrimas hubo en el camino.
  • que es indescriptible esas emociones y reacciones químicas que suceden en el interior del cuerpo, cuando uno sabe que está haciendo algo que "no debería hacer" y mejor aún, que sabe perfectamente que alguien más lo está viendo o se ha dado cuenta, ese alguien: el implicado en cuestión. Podría ser una forma de exhibicionismo, no en el sentido meramente sexual que implica de por sí la palabra. Y que al final de eso hay un cierto miedo pero ganas de sentirse in fragantti.
  • que ayer compré un DVD pirata en el metro (después de mucho tiempo de no comprar un CD de musica pirata, por haberme sentido estafada por los $10 pesos que pagué, jejeje) y más tiene cara de VCD pero la música que trae me encanta, no hay una mala, así que verdaderamente le atiné.
  • que no importa cuan grande sea el caos a mis ojos, todo tiene una salida, hasta la misma muerte: no somos tan grandes ni tan finitos como nos imaginamos, qué ironía.
  • que uno puede volverse adicto a ciertas cosas o incluso personas (y léase: que le gusta, no que necesariamente moriría por ellas) y que por lo general eso que lo atrapa a uno es lo que por momentos quisiera uno mismo vivir en carne, hueso y mente.
  • que siempre existe la oportunidad de mirar atrás, recordar, reírse a carcajadas por ello y no necesariamente vivir en el pasado.
  • que uno puede soñar despierto y perderse en sus propios mundos.
  • que la música puede transportarlo a uno a otras épocas, otros años o a la noche anterior.
  • que cuando uno comprende que las personas llegan y luego se van (o las dejamos irse), con la certeza de que se apreció, se experimentó, se aprendió, se quiso y se vivió en terminos totales cuanto se pudo, entonces no hay lugar para arrepentimientos.
  • que existen esas chispas que le encienden a uno la pasión, la inspiración y el deseo de moverse, de actuar, de dejarse ver, de sentirse libre y de arriesgarse.
  • que al final de todo la esencia de uno mismo permanece.
  • que uno siempre puede decir "te amo", "te quiero", y que aunque muchas veces falte valor para hacerlo, es un derecho que siempre tendremos.
  • que a pesar de que en la balanza a veces puedan pesar más los fracasos, uno sabe que es algo que tenía que hacerse y que era mejor así que haberse quedado de brazos cruzados.
  • que puede sentirse uno con cierta sensación de soledad, pero al mismo tiempo siente que al otro lado hay alguien que comparte esas cosas que son comúnes solamente entre los dos.
  • que aunque se que mañana tengo que levantarme temprano, poner mi cerebro a funcionar y hacer algo productivo por aquello que me da la oportunidad de conocer, vivir y disfrutar de mil cosas, prefiero dejar que mis manos sigan tipeando libremente y hasta sin sentido. Ya llegará el momento en el que este cuerpo dormirá para siempre.
  • que uno puede conocer personas que le abren los ojos a un mundo completamente nuevo y que cuando llega a ese mundo, se siente flipado.
  • que siempre, cada instante, esta vida es la de uno mismo, y por difícil que parezca creerlo, siempre hay una oportunidad de elegir.
  • que nunca es tarde, lo tarde es no haberlo intentado.
  • que pueden pasar días, meses y años desde la última vez que se supo de aquella persona, pero cuando sucede, el corazoncito brinca de emoción.
  • que existen las maripositas en el estómago y las ganas de dedicar cuanta canción hay.
  • que cada día hay un millón de cosas por las cuales sentirse agradecido y que solo basta ser conscientes de una de ellas para sentirnos afortunados.
  • que en resumen, hoy siento que me encanta la vida y me encanta mi vida.

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